Estimada comunidad del Colegio Integrado San Pío X de Talca:
Me permito utilizar esta vitrina en mi calidad de Rector para compartir con ustedes el pesar que existe en el colegio por los últimos acontecimientos de violencia ocurridos en nuestro establecimiento.
La pandemia nos trajo una serie de cambios y transformaciones y el retorno presencial a clases nos ha desafiado a enfrentar y asumir las necesidades y dificultades de nuestros estudiantes.
Una de ellas ha sido la violencia y es por esto que quiero compartir con ustedes unas palabras.
Como dije precedentemente, ha llegado la violencia escolar a nuestro colegio a través de peleas entre estudiantes de los cursos superiores de Educación Media. Han sido dos casos y en ambas situaciones aplicamos los protocolos y normas que se encuentran escritas en el Reglamento de Convivencia Interna. Los casos no son iguales ni los actores involucrados tampoco, pero créanme que haremos todo cuanto esté de nuestra parte para evitar que esto siga avanzando. Lamentablemente no puedo decir que esto no volverá a ocurrir, pero sí les puedo asegurar que estamos haciendo esfuerzos internos para apoyar a los estudiantes en todo el sentido de la palabra. Tenemos agendadas sesiones de trabajo como Consejo de Profesores para revisar y tratar de comprender lo que está sucediendo. La reflexión y las conclusiones de estas sesiones nos iluminarán para tomar las decisiones adecuadas en el momento justo.
Tal como ocurre en la justicia del país y aunque sintamos recelo al hacerlo, no puedo dejar de decir que las disposiciones legales en educación nos obligan a atender tanto al agresor, como al agredido. Y más aún, estamos obligados a responder al resto de la comunidad que confía la educación de sus hijos al Proyecto Educativo que se propone en el Colegio Integrado San Pío X de Talca.
Es difícil ver y escuchar las situaciones de violencia que se están dando entre estudiantes en nuestro país y en nuestra ciudad. Pero es infinitamente más duro ver que se dan en nuestra comunidad. La violencia nunca será la manera más humana y libre de enfrentar las dificultades. No puedo más que reflexionar y escuchar a los involucrados para entenderlos y apoyarlos.
Humildemente, les pido a todos que tomemos estas experiencias para reflexionar en familia sobre lo que nos está pasando como personas y como sociedad.
Por lo anteriormente dicho y con mucha humildad religiosa, pido a la Virgen María, a San Pío X, a Dios Padre que nos entreguen las luces necesarias para conducir el colegio según su voluntad, en paz, orden y seguridad, para todos y todas los integrantes de nuestra familia.
Pido a todos ustedes unirnos en oración para poder ser una comunidad robusta y centrada en la paz.
Reciban un afectuoso saludo de mi parte,
Muchas gracias.
Ricardo Escobar Cáceres
Rector
