Reciban un cordial saludo y considerando nuestro deber de mantenerlos informados del quehacer de nuestra institución, nos vemos en la obligación de referirnos e informar la realidad sobre los últimos hechos acontecidos al interior de nuestro colegio.
Hace unos días estudiantes de nuestro establecimiento dieron a conocer ante la Unidad de Convivencia Escolar algunas situaciones que les llamaban la atención, que les generaban desconcierto y que estaban relacionadas con la interacción con un funcionario del Colegio. En ningún caso esta interacción estaba asociada a hechos de acoso, connotación sexual, de violencia, agravios o con carácter de delito. Esta situación fue tratada por la encargada de convivencia escolar, junto a los involucrados, según lo establecido en nuestro reglamento interno. Como Colegio existe el compromiso de entregar a todos nuestros estudiantes y funcionarios las herramientas y apoyos necesarios para que su estadía en nuestra institución sea tranquila, positiva y segura. Todas las medidas tomadas son conocidas y aprobadas por los involucrados, por otro lado, a solicitud de las
familias se mantendrán las medidas en la reserva necesaria, debido al contexto actual.
Recordemos que nuestro interés y compromiso se refleja en la siguiente cita del Reglamento Interno: “El reconocimiento de los derechos individuales y sociales incluye a todos los miembros de la comunidad escolar, quienes encontrarán en el CIT un ambiente de apoyo, respeto, imparcialidad
y justicia” (Reglamento Interno página 25).
Más allá de la situación antes mencionada, nuestra institución se ha visto afectada por hechos relatados a través de redes sociales que no se ajustan a la verdad, los que han generado una innecesaria exposición de algunos miembros de nuestra comunidad escolar.
Relacionado con lo anterior, rechazamos la ligereza e irresponsabilidad con que se crearon audios y textos que denostaron la honra del Inspector Juan Manríquez, atribuyéndole un hecho delictual que jamás existió en el pasado ni el presente. De igual forma, rechazamos como se les impugnan a
funcionarios y docentes de nuestro establecimiento responsabilidades en los hechos, faltando a la verdad.
Esta experiencia nos convoca a una reflexión sobre lo que somos como comunidad, el respeto que debe existir, la responsabilidad sobre las propias palabras y el camino que tenemos que recorrer para salir fortalecidos de esta inusitada experiencia.
Estamos convencidos de que día a día nos fortalecemos como institución, gracias a lo que cada uno de ustedes y nosotros entregamos en pro de los sueños y metas que tenemos, atendiendo al bien superior de nuestros estudiantes.
A todos quienes quieran desestabilizar la armonía de nuestra institución, los invitamos a buscar caminos de unión y construcción; y en adelante, resolver las dificultades con la experiencia aprendida, siempre por medio del respeto y diálogo sincero, como nos guían los valores de nuestro
Colegio.
¡Benditos sean los que en Dios ponemos nuestro corazón!
Equipo Directivo Colegio Integrado de Talca
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